Como fueron pocos los que jugaron con la tulita de algún amigo o pololo, hubo que conformarse con puras pajas, para calmar la naciente calentura. Clásicas era hacerse una: al despertar, en la ducha, al vestirse, antes de salir, al llegar, al ver tv, al acostarse y antes de dormir [o sea realmente eramos unos pejeros].
Mucho se ha dicho sobre las consecuencias de las pajas: que vuelven loco, demente, impotente, eyaculador precoz, entre otras tonteras, pero nada de eso es cierto, lo decimos con experiencia, ya que no tenemos ninguna de esas cosas, solo maricones adictos a la pichula, pero nada mas .
Con posterioridad, cuando ya tienes un amigo con ventaja o pololo formal, te quitas la calentura teniendo rico sexo o haciendo una variacion manfinflera, correrse la paja mutuamente o tomar ambas tulas con una sola mano. Aunque de vez en cuanto, no es malo un rico jugueteo.
Como buen acompañamiento puedes ver sus buenos y calientes fotos o videos. También ayuda al movimiento colocar algo de lubricante. Una cosa un poco mas extrema para acompañar es corrersela con anilllos de goma [nunca con rodamientos], con frutas [haciendole un hoyito] entre otras cosas [estas ideas fueros sacadas de Historias Gay Freak en, y también acompañar por detrás, con consoladores, dedos, frutas y verduras.
Pollito Van Rysselbergue